(1)Según la mitología, el pelícano devolvíala vida a sus hijos muertos hiriéndose a sí mismo y rociándolos con su sangre. (Cfr. SAN ISIDORO DE SEVILLA, Etimologías, 12, 7, 26, BAC, Madrid 1982, p. 111). Cristo, como el pelícano, abrió su costado para salvarnos alimentándonos con su sangre.
Los comentarios están cerrados.
¿Por qué reservar DIRECTO?
Beneficios por reservar directamente en nuestra web
Mejor precio garantizado
Reserve en 2 pasos
Confirmación inmediata
Acceda a descuentos y ofertas exclusivas por reserva directa